La tragedia de una Madre, luchaba por recuperar a 1 de sus 2 hijos, el otro ya había muerto a manos de su padre.

DULCE GABRIELA, LA TRAGEDIA DE UNA MADRE, LE ARREBATARON A SUS HIJOS, EL MENOR MUERE A MANOS DE SU PADRE Y ELLA  APARECE MUERTA.

La tragedia de Dulce Gabriela Flores González, vecina de la colonia Cuautlixco, en Cuautla, Morelos, comenzó cuando el padre de sus dos hijos menores, con quien ya no vivía, se los llevó, primero con el consentimiento de ella, pero después ya no se los devolvió, negándose a contestar sus llamadas. Esto ocurrió hace más de un año.

Dulce viajó hasta Celaya y realizó una denuncia por sustracción de menores, sin embargo  el juez Gabriel Cesar Miranda Flores ya había otorgado la custodia a su ex pareja, luego de que la jueza Laura Galván inició un expediente sin que Dulce fuera notificada del proceso. Al buscar ayuda se encontró con la indiferencia de dependencias como el DIF y el Instituto de la Mujer. Desesperada, como último recurso buscó la escuela donde sus hijos estudiaban para poder verlos.

Nunca se imaginaría que un día en que acudió a la escuela para saber de sus pequeños, coincidió en que una de las maestras había mandado  a llamar al padre y a su actual pareja para saber porqué Fernando, de 8 años,  había llegado con golpes en cara y brazos.

En encuentro de Dulce con el padre de sus hijos fue ríspido, recibió insultos por parte de su ex pareja, quien tomó a los niños y se los llevó.

El mayor dolor para esta madre llegó el 9 de mayo, cuando recibió la llamada de la docente de la escuela para darle el pésame por la muerte de su hijo menor. Consternada por la noticia acudió hasta San Elías, donde era velado el cuerpo de su pequeño. Nuevamente, al reclamarle al padre y a su pareja por esta tragedia, fue echada junto con su madre del lugar por la policía. Lo mismo ocurrió en el entierro del menor donde la madre y abuela de Fernando no pudieron estar.

La indignación no terminó aquí.

Dulce sabría después que el 8 de mayo, un día antes de recibir la noticia de su muerte, el menor fue llevado en la madrugada por su padre y su pareja a un hospital privado porque ya no respiraba, Al llegar a dicho nosocomio el medico les informó que el niño ya no tenía signos vitales.

A decir de la pareja, el niño se había suicidado. Para Dulce eso era imposible.

Los golpes con los que Fernando llegó al Hospital, activaron el protocolo para iniciar la investigación, por lo que la pareja fue detenida por la Fiscalía General del estado de Guanajuato que inició la carpeta con número 53518/2023.

Con mayor razón y para proteger a su segundo hijo, Santiago,  Dulce pidió su custodia, pero aquí iniciaría una batalla legal más en la cual nuevamente vivió la violencia institucional,  pues la custodia de su segundo hijo le fue otorgada a los abuelos paternos.

Derrotada, Dulce regresó a su casa en Cuautla, de donde salió el pasado sábado. Al no regresar, su familia la reportó como desaparecida. A su exigencia de búsqueda y localización se sumó el Frente Nacional Contra la Violencia Vicaria al que Dulce había recurrido para que la apoyaran a recuperar a sus hijos.

Hoy, una nueva investigación se inició, pero esta vez por la Fiscalía General  del estado de México, debido a que Dulce, apareció sin vida y con huellas de violencia  este mièrcoles 26 de julio en Ciudad Neza.

Para su ficha de búsqueda, se dieron detalles para identificarla. En su espalda, tenía tatuadas las iniciales de los nombres de sus hijos, S y F, los hijos a los que ya no pudo recuperar.